Me gustan las cámaras de fuelle. No era algo que me gustase hace no mucho, pero ahora me encantan. Y también me gustan las cámaras equipadas con un telémetro. De ahí que la Super Dollina II me pareciese una preciosidad desde el primer momento en el que la tuve en mis manos.
La Super Dollina II es una cámara de fuelle fabricada por la compañía Certo en los años 50. Es la última representante de unas buenas cámaras compactas. De ahí que tuviese una calidad, unas características y unos complementos excelentes. Fabricada en buenos materiales, con unos preciosos detalles en cuero y cromo, la Super Dollina II es un claro ejemplo del diseño de las cámaras fotográficas del periodo de la Segunda Guerra Mundial. Era y sigue siendo una cámara para toda la vida, que te enorgullece enseñar.
Si nos centramos en las ópticas diremos que fue equipada con unas cuantas marcas diferentes, pero en mi caso tiene unas Carl Zeiss Jena de 50mm con f2.8. Viene equipado con un disparador Cludor 200 que tiene velocidades que van desde el segundo hasta el 1/200. La apertura se mueve del f 2.8 hasta el f 22.
En la parte frontal dispone de tres aberturas. La de la derecha pertenece al visor, mientras que las otras dos forman parte del telémetro, que se gestiona con una rueda que se encuentra en la parte superior derecha. Para usarlo tendremos que mirar por la segunda apertura que tenemos en la parte trasera. Observaremos que la imagen se dividirá en dos y usando la ruedecita acabaremos acomplando. El propio telémetro gestionará el enfoque de la cámara, ofreciéndonos además un valor de distancia en el medidor que se encuentra en la parte superior. Sólo nos faltará cargar la cámara y disparar con la velocidad que escojamos.
La Super Dollina II utiliza carretes de 35mm tradicionales, lo que la sigue haciendo interesante a día de hoy. Tiene conexión PC para flash y carece de zapata para accesorios.
Mi Super Dollina II
- Objetivo número 3616459. No encuentro ningún otro número de registro.
- No he podido datar mi Super Dollina II. Creo que será de los primeros modelos, aunque es un modelo cuya producción se mantuvo durante más de 20 años.
- Estéticamente está en mi buen estado. Algunas muestras de uso en la parte superior.
- La tapa retractil no abre ni cierra de forma eficiente, al menos no como cuando estaba nueva.
- Lentes limpias, visor y telémetro en buen estado. Dispara sin problemas.
- Recibida con su caja original, una funda en buen estado, un parasol para el objetivo y dos disparadores muy antiguos.
Primeras pruebas
Aprovechando que tengo un montón de carretes nuevos he decidido empezar a probar algunas de mis cámaras favoritas. Antes de ello, suelo comprobar la mecanica de cada una de ellas con un carrete ya velado. Hice este proceso con la Super Dollina II y parece que tengo malas noticias. Puedo correr la película sin problemas, pero no encuentro ningún punto de parado para saber que se ha desplazado el tamaño de película suficiente como para que no haya sobreexposición. Tampoco encuentro una ayuda visual que me informe de ello.
Es una auténtica pena ya que la cámara tiene una pinta increíble, además de una buena óptica. Seguiré probando, pero de momento me da mala espina.
Desde ya te adelanto que uno de sus puntos débiles por así decirlo son sus visores, tanto el de toma directa como el del telémetro. Ambos son muy pequeños y algo incómodos, especialmente para aquellos que tenemos gafas.
Manual Super Dollina II
He encontrado un manual para esta cámara aquí. Está en inglés.
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