La semana pasada saltó a la palestra una empresa llamada Zetta. El viernes salía un reportaje sobre su proyecto, que era el de vender smartphones ensamblados y diseñados en Extremadura. Las piezas se fabricaban en China, pero el montaje, el diseño y el desarrollo de su software se hacía en nuestro país. Luego saltó el Bellotagate por culpa de Forocoches y descubrimos la verdad. Zetta compraba móviles Xiaomi, les quitaba la carcasa, colocaba una con su marca y editaba el sistema operativo muy por encima. Finalmente, vendía el producto al doble de su precio original. Entre las múltiples cosas que se han dicho sobre este fenómeno, se ha intentado comparar con un caso de tremendo éxito en nuestro país como es el de Hawkers. ¿Hace esta marca de gafas de sol un Zetta? ¿Es lo mismo? me he sentido tentado a explicar mi visión acerca de este cambalache, que no es simple.
Marcas blancas y patentes en China: bienvenidos al mundo lowcost
Todos somos conscientes de lo barato que resulta realizar una producción en tierras asiáticas. Piensa en cualquier producto de consumo diario y probablemente su fabricación se realice en China o alrededores. Tu móvil, la afeitadora eléctrica, los tuppers,… son productos made in China. Es por eso que el tejido productivo de este país sea tan amplio y, sobre todo, barato.
Vale, ahora imagínate que tienes ganas de emprender y quieres montar un negocio de gorras. En China encontrarás mil y una empresas que podrán ofrecerte un producto de calidad a un precio irrisorio si lo comparas con una producción realizada en España. Si aquí una visera cuesta 1 euro en fábrica, puede que el precio chino se divida en 4. Vale, tenemos lo principal, una producción a bajo coste, ahora añádele diseños basados en patentes que ya son públicas. Ponle un packaging bonito, véndelo a la menos de la mitad del precio medio de tu competencia y tendrás un negocio que puede ser la bomba. Trabaja las redes sociales, genera una gran comunidad, déjate miles y miles de euros en publicidad social, haz acuerdos con grandes comunidades de usuarios (webs, foros, etc.) y acabarás dando un pelotazo. Parece simple, pero no lo es.
Ése, muy por encima, puede ser el caso de Hawkers. Fabrican en China unas gafas lowcost, con un diseño clásico, basado en patentes obsoletas o libres que le dan un toque actual, el efecto polarizado. Los materiales son simples pero atractivos. Reduces gastos, intermediarios y lo vendes a un precio competitivo. ¿Es legal? ¿es ético? hasta donde yo sé, lo es.
Ahora nos vamos al caso de Zetta. Vas a China y, en lugar de hablar con un fabricante de electrónica, vas directamente a un suministrador de móviles. Compras un montón de productos de stock. Hablo de productos que están listos para ser vendidos, no un material sin marca esperando en fábrica. Te los traes a España o pides a una fábrica china que te los customice para que no quede ni un atisbo en principio de su marca original.
Ahora preparas un packaging, empiezas a vender motos y a generar humo. Dices que es un diseño propio, que tu gente se está currando el sistema operativo. Hasta tienes un diseñador que dibuja en papel los diseños del móvil. Si te descuidas, hasta puedes pedir ayudas a las administraciones porque eh, estás creando una empresa de nuevas tecnologías en tu tierra. Finalmente, aumentas hasta un 100% el precio original del producto. Otra historia bonita, eh.
A diferencia de Hawkers, Zetta se lucra directamente del trabajo de otros. Ya no hablo de los diseños, que está claro que Hawksers usará patentes que en su día fueron de otras marcas, sino del trabajo directo. Hawkers no coge unas Ray-Ban, quita la marca en éstas y las revende diciendo que son propias y originales al doble de su precio original. Hawkers aprovecha los recursos abiertos y la producción lowcost para abaratar su proceso productivo. La empresa de gafas de sol no vende humo, sólo gafas de sol baratas y de calidad básica.
Existen muchos ejemplos de productos que se venden en occidente basándose en una nueva marca. Si vas a Media Markt, encontrarás muchísimas marcas de productos electrónicos (tablets, teles, mp3s…)que se venden a un precio muy barato. Algunas incluso son españolas. Éstas no hacen otra cosa que llamar directamente a la puerta de una fábrica china y piden que les hagan un stock de X productos basados en su linea de producción. Se dará el caso de que las televisiones Guachi en España son en realidad las Lazski en Polonia. Son diferentes marcas que compran directamente al fabricante.
A veces, incluso se desarrollan marcas para revender productos sobrantes de un stock masivo. ¿Os acordáis de los coches Galloper? los del anuncio de Georgie Dann. Esta marca nace por un modelo de Hyundai… que a su vez se basa en otro de Mitsubishi. La primera fabricaba todoterrenos para la segunda. La crisis del sector a finales de los 90 les dejó un montón de Hyundai Galloper sin vender. Vieron que cada año había miles de españoles que importaban Mitsubishi Montero, que eran en realidad el mencionado Galloper.
En ese momento, y debido a un acuerdo entre las dos empresas, decidieron crear una nueva marca para vender en occidente los excedentes de stock de versiones anteriores del todoterreno. Se vendieron muchísimos Galloper, y Mitsubishi e Hyundai pudieron liberarse de un stock obsoleto en sus países de origen. Como ves, existen mil formas de vender productos de importación en occidente, pero todos ellos dentro de un margen legal o ético.
Personalmente, me parece injusto comparar estos dos casos. Nunca he sido fan de Hawkers, ni me gusta su producto. Su marketing de guerrilla me puede llegar a parecer tedioso y empiezo a estar harto de que sea siempre el ejemplo de caso de éxito en la red. No les quito merito, puesto que lo tienen, aunque personalmente no me guste su estilo. Pero nunca compararé a Hawkers con un caso como el de Zetta, independientemente de cómo acabe éste.
Son dos conceptos totalmente diferentes, no sé quien los habrá comparado, en todo caso los dos se aprovechan de lo barato que es producir en China.
Un único apunte, si una visera vale 1 euro en España, en China no llega a los 4 céntimos :D
Las Hawkers son bonitas… otra cosa es que la calidad sea muy mejorable. Supongo que es cuestión de gustos. Con respecto a Zetta, pienso que el problema viene del marketing mentiroso de hacer ver al mundo que eran una empresa tecnológica, cuando, en realidad, sólo eran poco mas que distribuidores de Xiaomi. Si llegan a ir de frente desde el primer día, contando la verdad, no les habría criticado nadie. Yo no, desde luego. Pero es que iban por los platós de tv vendiendo que eran la nueva Apple española. Ejem… menuda broma de mal gusto.