Hola, ¿Cómo estas? permite que me presente. Soy un post o artículo de blog. Para que te hagas una idea, soy como un hilo de Twitter pero mucho más cómodo. Además, convivo con muchos otros artículos en una misma biblioteca a la que le llamamos blog. ¿A que parece increíble? pues lo creas o no, existimos desde hace muchísimos años. Fíjate, aún no existía Twitter cuando nosotros ya teníamos un evento dedicado. ¡Y hasta unos premios!
Como observarás, en un post la información no tiene porque estar dividida en 140 caracteres. No existen limitaciones de escritura en los blogs, ¡asombroso! Además, resulta mucho más fácil escribir un post como yo. Para empezar, no debes ir enlazando tweets. No debes acortar frases y así evitas acortar frases o palabras. Y atento a esto: ¡no debes ir borrando tu nick en cada tweet!
Por otro lado, los posts como yo son mucho más cómodos de leer que los hilos. La información va debidamente estructurada sin ningún tipo de corte engorroso. En los posts no se cuelan las menciones que alguien deja entre tuit y tuit que enlaces. Aquí, los comentarios van al final, si es que los quieres tener activos. Ah, y puedes usar las fotos que quieras, o los vídeos, o los GIFs.
Además, los posts son muy cómodos de compartir en cualquier sitio. Quedamos bonitos en Twitter, Facebook o en Google. Es más, gracias a esta biblioteca llamada blog, los posts acabamos indexándonos en Google, así que podemos recibir mucha más visibilidad que un hilo. A veces, nos mandan a una cosa llamada Meneame que, si les gustamos, acabamos recibiendo muchísimas visitas.
En definitiva, un post gana en usabilidad, comodidad, organización,… y todo gratis. Vale que mi amo pague por un dominio, pero puedes hacer lo mismo en plataformas totalmente gratuitas como WordPress o Medium. Suena bien, ¿eh? pues ya sabes, si vas a contar historias, nada mejor que un blog.
Atentamente.
Un post cualquiera.