- Los crossover de Allen Iverson.
- Un pretexto ideal para trasnochar.
- Decenas de partidos al año ganados sobre la bocina.
- Camisetas como la de de Toronto o de los Vancouver Grizzlies.
- Porque vemos volar a gente como J.R. Smith.
- Hay Finales que rozan lo artístico.
- Porque te incita a gritar “¡JUGÓN!” cada 5 minutos.
- Kobe Bryant metiendo 81 puntos.
- Lebron James o el Rey de lo artístico.
- Tracy McGrady haciendo lo imposible: 13 puntos en 35 segundos.
- Concurso de mates del 2000: Vince Carter se doctora.
- Air Jordan XII
- Nate Robinson (1,75) tapona a Yao Ming (2,29).
- El único lugar en el que metes una canasta que vale 75.000$… y hasta Lebron se alegra.
- Un clásico: Pau Gasol haciendonos sentir orgullosos.
- Antoni Daimiel.
- Otro clásico: Jordan contra O’Neal, uno contra uno.
- Seguimos con los clásicos: Julius “Doctor J” Earving.
- Ha habido grandes deportistas, y por encima de todos, Magic, el rey de la asistencia.
- Pases que pasan a la historia: Chocolate blanco Williams (comentado por Montes y Daimiel).
- NBA League Pass (que aunque este año haya subido, sigue siendo una autentica gozada).
- Donde los sueños se hacen realidad: Jeremy Lin.
- Michael.
Sinceramente, hay mil cosas por las que amar el baloncesto y otras tantas por las que amar la NBA. Es el deporte de mi vida. El que vi en aquellas retransmisiones a principios de los 90 narradas por Trecet. Donde jugaban mis idolos, a saber: Ewing, Starks, Jordan, Abdul Jabbar,… Vuelve la NBA. Las ojeras, las noches en vela y una cuenta atrás hasta las finales de junio. Esperemos que este año mi vecino no tenga que llamar al timbre a las 6 de la mañana por culpa de cierta canasta de Lebron James. O si, que leches.