¿No os apasiona ver cómo los partidos políticos se van escudando en problemas menores para así no tener que hacer frente a otros más importantes? El mejor ejemplo lo tenemos a día de hoy. En España hay entorno a 46 millones de habitantes. de los que, supongo, habrá cerca de 20 millones de personas en edad de trabajar. De estos, uno de cada cuatro no tiene empleo, en total, 5 millones de personas, los cuales son el sustento económico de otros tantos millones. Hablamos de un buen porcentaje de la población española. Un porcentaje de dos digitos. Sin embargo, el problema de España no son los parados. Tampoco lo son los miles de personas, ya sean politicos, empresarios o señores de a pie estafan o tienen algún tipo de negocio corrupto. Hasta ETA ha dejado de ser un problema. ¡Con lo que ha sido la ETA!
Ahora el problema son los escraches. Un escrache, amigo mío, no es ese ruidito que hacen los dj’s de rap al girar el disco hacia adelante y hacia atrás. Un escrache es una concentración pública, una protesta entorno a la casa de algún lider político. Ya puede estar media España sin un duro y en el apro, o ya puede haber más ladrones que en la cueva de Ali Babá, que lo importante son los escraches. Hablando en lenguaje de la derecha: el problema, de nuevo, son los perroflautas, que son los nuevos de la ceja, que anteriormente eran los batasunos, que eran proetarras. Vamos, que son los nuevos enemigos del país (del territorio, se entiende, no del periodico).
Voy a tocar un tema espinoso. Está claro que el tema de los desahucios no es el mayor problema español. Sin querer faltar al respeto a ninguna de las decenas de miles de personas que están pasando por este calvario, diré que en España hay problemas que en global afectan más a la sociedad. Repito, sin querer ofender a nadie, me parecen más importantes los recortes sociales, el desempleo o el nivel de pobreza, sobretodo cuando más de tres cuartas partes de la población que tiene un prestamo hace frente al mismo sin problemas. Dicho esto, creo que potenciando esta crítica hemos conseguido crear una cortina de humo. Antes los politicos hablaban del terrorismo, de los nacionalismos… de temas que controlaban hasta cierto punto. Por desgracia, ningún partido mayoritario, ya sea el de la gaviota, el de la rosa, los plurales o los magentas, han sabido sacarnos de la crisis. El mejor ejemplo es que todos, absolutamente todos en algún momento apartan los problemas serios y van a jugar al abrro, al tema polémico o que esté de moda. Está claro, si no sé cómo solucionarlo, creo una cortina de humo y me alejo del centro del interés mediatico.
Con los desahucios, escraches y demás, hemos conseguido eso, una cortina de la que encima esperan sacar réditos electoralistas. El Gobierno lo acepta, aunque sea un problema y no precismente “menor” en lo que a sociedad se refiere. Sabe que mientras hablemos de escraches, no se hablará de Bárcenas, recortes, recesiones y demás males endémicos de nuestro país. Saben que van a perder, así que han decidido elegir perder poco en lugar de jugarsela sin tener ni idea de cómo salir del marrón. El clásico no hay mal que por bien no venga. Si lo pensáis, les ha tocado la loteria. Con la que esta cayendo, en cualquier otra época los hubiesen asesinado, martiriado, dilapidado o cualquier otro tipo de salvajada. Sin embargo, nosotros somos la sociedad civilizada, y sólo vamos a gritarles al portal o rellano de su casa. ¿Qué sufrimiento, eh?
¿Qué podemos hacer? amigo, no te voy a engañar: no sé la respuesta. El poder, sea cual sea éste siempre tendrá un colchón en el que caerse. Si nosotros apramos, ellos no ganan dinero, por lo que no nos pagan, eso ahce que nosotros no comamos y seamos pobres y finalmente caigamos. Una espiral sin fin.