Hace un rato leí un artículo en el blog de Martu Garrote. En él quiere dejar bien claro que no todos los políticos son iguales. Que los hay con principios y con ganas de cambiar las cosas y mejorar el estado de la sociedad. Algo que en el fondo es normal. El problema que le veo al post es que he leído algo en lo que no estoy de acuerdo. Os copio las primeras líneas del post:
Todos los políticos son iguales. Da igual PP que PSOE. Todos los políticos están ahí para trincar. Da lo mismo qué partido Gobierne porque van hacer lo mismo. Son todos unos corruptos.
Estas y otras muchas frases de similar idea marco, están pensadas, ideadas y sistemáticamente difundidas por la derecha mediática española, con un solo objetivo, convencer a la ciudadanía de izquierdas para que no acuda a votar.
Con el debido respeto, creo que esto no es cierto. Y lo dice un votante (o ya exvotante) socialista que ha sido fiel al partido desde los 16 hasta los 25 años. He sido un fan boy, pero con el paso del tiempo me he hecho más democrático y más plural, mientras que el Partido ha tomado un camino centrista que cada día convence menos al votante. La última legislatura Socialista no fue buena. En gran parte por la gestión de la crisis. Gestionaron de forma impecable muchas de las medidas sociales, que suelen ser populistas y generan cercanía frente al votante. Pero perdieron la batalla frente a la crisis. El Partido Popular les ganó sin que tuviese que preparar un programa electoral. Mi ser mitológico favorito es el programa electoral del PP de las generales de 2011. Lo dicho, que esta vez no se ganó unas elecciones, más bien se perdieron. Pero en el fondo siempre es así, al menos en nuestro país. El PSOE perdió en los 90 por la crisis, la corrupción relacionada con el partido y casos como el GAL. Vamos, salió la mierda a flote y eso no gustó. ¿El mandato de Aznar? ¿Os acordáis del 2004, verdad? Sobran las palabras.
Es cierto que la gran mayoría del periodismo de este país es afín a la derecha, pero el contubernio que se quiere encajar en el post de Martu está a años luz de ser verdad. Si hoy el PSOE está hundido (que lo está), es porque ha perdido mucha cercanía con el electorado. Seamos realistas, la “oposición útil” dista mucho de lo que necesita la sociedad en estos momentos. Rubalcaba es demasiado correcto, y como él mucha gente de la cúpula. Que por ejemplo salga Soraya Rodriguez, le pregunten por la bajada de sueldo del rey y oye, diga que está bien, pero sin énfasis, de forma muy estéril… como que no. La gente está muy asqueada de palabras. Necesita hechos, y en el PSOE siempre hemos sido muy de ser de palabras, escritos, memorandos y de ser muy del pueblo, pero a la hora de la verdad nada. Ahí tenéis el caso del ERE del PSOE. Lo tuiteé en su momento, ocurre eso al revés y se hubiese vuelto a dar el alzamiento nacional. Sin embargo ahí está el PSOE, con su oposición útil, su gobierno abierto y sus palabras bonitas. Por cierto, mientras hacen todo eso el país se hunde, el paro sube, la bolsa se desploma y la prima de riesgo marca record históricos.
La Razóny El Mundo no nos engañan. Los segundos aun siguen vendiéndonos la moto etarra del 11M, y quitando a los fanboys de Pedro Jota y a él, creo que ningún español tiene dudas acerca de la autoría de esa barbarie. Las portadas deLa Razóntampoco ayudan a generar confianza en el PP o en odio al PSOE. Más bien generan iras frente al medio. Que no, que no nos engañan. Que si ya no me siento del PSOE no es por culpa de la derecha, es por culpa del partido y de su gente. Porque fue salirse del poder y que medio partido se pusiese patas arriba por pillar su trozo de turrón, su cachito de poder. Porque el congreso en el que Rubalcaba salió elegido tuvo que haber sido un punto de inflexión en la historia del PSOE, pero más bien fue una reorganización del poder. ¿Qué me decís de las decenas de luchas locales por el poder dentro del partido?
Llevo meses pensando en ello y sigo creyendo que el PSOE ha de refundarse o regenerarse de alguna forma. Nuevas caras, más jóvenes o más cercanas a la realidad nacional. Menos postureo, menos amigos, menos ansias de ascender y más ganas de trabajar. Más honestidad, menos palanganeros, fanboys o chupapollismos internos. Más democracia interna, pero esto no significa que se de a cualquier precio. Las mociones internas o los grupos que han pedido cambios internos dentro del PSOE se han dado en muchas ocasiones por querer conseguir poder. Y muchos de los que apoyan estos cambios lo hacen por mero interés, por lograr un puesto mejor, o sencillamente ser parte de alguna lista en las próximas elecciones. Que si, que hay que hacer cambios, pero no cualquiera y sobretodo no a cualquier precio.
El PSOE debe crear propuestas, pero el PSOE no deja de ser una empresa en la que sus clientes son muchos millones de españoles. Hay muy pocas empresas que como Apple, digan lo que el usuario quiere. Este no es el caso del PSOE. Deben pararse y escuchar a los indignados, a los parados, mineros, jubilados, inmigrantes… No tienen que presentarles propuestas, tienen que crearlas junto a ellos. Tienen que demostrar que si el PSOE existe es porque representa a la gente de la calle.
Claro que hay políticos honrados. Yo mismo lo hubiese sido. Cuando tenía 16 años era la persona más honesta y con más ganas de entrar en ese mundo. Y aun sigo siendo honesto, pero no me siento representado por el que pensaba que era mi partido. Soy socialista, pero no del PSOE. Al menos no de este PSOE.
Lo que pides al PSOE es tan sencillo y cierto como imposible. Si no lo han hecho ya es por ello que digo que es imposible, no por que no puedan hacerlo. Pero toda la gente que está ahí dentro comulga con el sistema actual que les ha llevado a esta derrota y que les lleva a ese modelo de trepismo del que no quieren salir en ningún partido grande. Esos dos de siempre.
Por alusiones: dentro de poco voy a publicar un post que se llama DESPECHO. El despecho es un sentimiento fortísimo que solo se tiene cuando primero ha habido amor y que hace que lo que antes se quería irracionalmente ahora se desprecie aún con más irracionalidad.
Eso es un poco lo que pasa al votante PSOE que puso tantas ilusiones y esperanzas en el Partido que al verle impotente frente a la crisis, ahora le desprecia.
Que el Psoe necesita un cambio lo digo yo también, está en mi MartuBlog, no me invento nada. Soy tremendamente crítica con los míos pero no consiento que se diga que PP y PSOE son lo mismo y eso es lo único que he pretendido dejar claro en mi blog.
Gracias por leerme, recomendarme y contradecirme, es un placer discrepar contigo
Pero te equivocas en una cosa Martu (Que por cierto, gracias por el comentario). Soy más que un votante. Soy simpatizante, de los de familia socialista. Lo mío no es despecho ni es algo que haya sido una rabieta por algo como es la crisis. Son las decenas de bajadas de pantalones ante el PP, de la poca agresividad en la oposición, de la falta de actividad en algunos frentes, de la forma en la que se han gestionado muchas facetas. De cortarse y no decir lo que quiere el electorado por miedo a que el PP lo critique. No es despecho, es sentirme abandonado y sin rumbo. Saber que puedo ayudar y que sólo confien en uno cuando hay que pegar carteles y buzonear. Eso no puede ser, y hasta que no se parta desde cero, el PSOe habrá perdido de antemano el peso de antaño.
¡Gracias de nuevo!
JAJAJAJAJA, crítica dice, me parto: sólo es crítica con los que no están de acuerdo con Tomás.