No hay sitio en este mundo en el que vivimos para la buena gente. Hace tiempo que me di cuenta de ello. Y lo peor es que por desgracia, soy un buenazo. ¿Está de moda ser más cabrón que el cancer? no diría algo así, pero si que es cierto que nuestra sociedad gira entorno al éxito individual, y que éste se antepone a cualquier cosa, hasta al daño ajeno. Hemos llegado a un punto en el que hemos acabado pensando más en uno mismo que en nuestro entorno. Como dice esa frase que la tuvo que decir el inventor del Tuenti, porque sale en 3 de cada 4 perfiles femeninos: “Las chicas buenas van al cielo. Las malas van a todas partes”.
¿Tenemos que ser malos? la verdad es que no, aunque debemos aprender a serlo. Debemos aprender a ser malos como cuando aprendemos primeros auxilios: por nuestra seguridad. Porque como he dicho, los buenos acabamos siéndolo en grandes cantidades, y eso hace que la gente se aproveche de nosotros. Por eso, el hijoputismo debería ser una asignatura más en el colegio, o al menos nos debería venir de serie a algunos. No tiene que ser un arma continua, sólo un mecanismo de seguridad para que nadie se ría de nosotros. Es una maravilla ser bueno, esto es así. Ser malo tampoco es algo prohibido, simplemente debemos encontrar los limites. Vamos, que en esta vida no hay que ser ni calzonazos, ni el mayor hijo de puta del reino.
Hace tiempo me di cuenta de mi bondad. Por eso, ahora uso ésta sólo con quien se la merece. Ayudo a quien me ayuda, y me intereso por el que se interesa. Quien viene por interés se gana la mayor de mis indiferencias. En estos últimos… 7 u 8 meses he aprendido varias lecciones, y entre ellas he destaco una: no hay nada mejor que ayudar para sentirte bien con uno mismo. He oído a muchas personas, y las he ayudado hasta donde he podido con sus problemas. Gracias a ello a día de hoy tengo más amigos y amigas que nunca. No seré un vividor, ni un follador, ni rico, ni famoso, pero soy buena gente, y eso siempre me trae alguna recompensa cada cierto tiempo.
Deja de ser malo. Madura, reacciona antes de que tu maldad haga que pierdas muchas cosas importantes. Y si quieres ser cabrón, tú mismo, pero no lo seas con quien no se lo merece. Si eres tonto y quieres pelea, busca a otro tonto, no agarres al primer infeliz que te encuentres y le des una paliza. Espabila, deja de ser tonto y se una persona buena. Porque con un poco de bondad nos iría mejor a la mayoría de nosotros.
¿Y por qué todo esto? porque si. Porque llevo una racha en la que me he encontrado con mucha gente mala que ha jugado con gente buena, y eso me quema. Y porque me apetecía dar un golpe sobre la mesa, que coño.