Si bien es cierto que las pasadas elecciones municipales fueron las primeras en poder llamarse “dospuntocero”, lo cierto es que las generales de Noviembre serán la primera gran unión entre las redes sociales y la política. Porque en España se saca mucho provecho de las elecciones, pero no es lo mismo un voto a tu alcalde o al presidente de tu país. Si, amigos, el 20-N se irá acercando poco a poco, y con él llegará la campaña electoral. ¿He dicho que llegará? por dios, a día de hoy ese termino está pasado de moda o desfasado. Los partidos políticos no dejan nunca de estar en campaña electoral, al menos en la última década. Cada fin de semana encontramos decenas de eventos políticos a lo largo y ancho de nuestro país. Por ejemplo, Mariano Rajoy lleva meses (por no decir años) haciendo campaña electoral, al menos desde el 22 de mayo. Rubalcaba, tres cuartos de lo mismo, sólo que éste, con unas semanas de diferencia.
Y por otro lado, está internet. La red de redes es un gran medio de comunicación y de entretenimiento, posiblemente el mayor canal del momento. Los partidos políticos llevan ya años publicitándose en medios digitales durante los periodos oficiales de campaña electoral, y las redes sociales han visto como todas las fuerzas políticas se acomodaban en busca del respaldo de sus militantes y simpatizantes. Con el dospuntocero también se creó otra tendencia, la de que muchos políticos acabasen entrando en la blogosfera o en Twitter. Primero como he dicho fueron los blogs, y más tarde los perfiles en Twitter. Si, poco a poco era mas raro no conocer a un político que no tuviese su cuenta en Twitter o tuviese su blog en el que opinar sobre la actualidad. Lo más curioso (o no) era que estos blogs o perfiles de Twitter sufrían una actividad increíble en momentos de campaña, pero morían después de ésta. Si bien es cierto que la mayoría de cuentas han seguido activas después de esos momentos, lo cierto es que no son pocas las que pasaron al olvido.
¿Por qué Twitter? ¿Por qué han de estar presentes en internet? ¿Lo hacen por la comunicación con sus votantes o con la gente del pueblo? yo diría que no, mas bien lo hacen porque su adversario ya lo está. Además, es otro canal para hacer ruido. Un canal barato, por cierto. Por ejemplo, añadir un hashtag o palabra a los trending topics nacionales, algo muy fácil si se prepara. ¿Creéis que un TT político es difícil? Tengamos en cuenta que cualquier partido político nacional tiene varios millones de simpatizantes, y que un buen número de éstos están presentes en las redes. También hay que decir que hay centenares de perfiles de secciones locales o regionales del partido presentes. Ahora imagina que desde arriba llega la idea de potenciar un hashtag. Las cuentas de la casa lo tuitean y sus seguidores lo apoyan. Pero imagina que lo hacen de forma escalonada. Primero, desde varias comunidades, mañana desde otras… Teniendo en cuenta que los que no apoyan ese TT lo usaran para ponerlo a parir, el resultado sería mantener un TT en la lista de éstos durante varios días sin haber pagado ni un mísero euro a Twitter. Facebook es otra historia, claro, ahí si que deberías pagar, pero en la red social de los 140 caracteres los partidos lo tienen fácil para hacer publicidad.
El mejor ejemplo lo tenemos con #Rajoypresidente. Dicha etiqueta fue trending hasta ayer tras haber estado varios días entre las listas de palabras más tuiteadas. Con este suceso más de uno se planteó qué cómo podía un TT mantenerse ahí durante tantos días sin estar pagado. Me explico, desde hace unos meses Twitter permite mediante consiguiente pago, colocar una palabra en su lista de trending topics. Estos TT’s están marcados como promovidos, por lo que no caben dudas. Normalmente suelen durar varios días, pero el TT normal no debería durar más de 24/48 horas. Y digo esto porque es la respuesta oficial que se dio cuando Wikileaks saltó a la actualidad. Los hashtags relacionados con este tema desaparecían misteriosamente a las pocas horas de haber saltado al top. Desde dentro de Twitter se informó que los hashtags que llegan a TT son singulares y no pueden repetirse debido al algoritmo que gestiona esto. También se comentaba que no duraban mas de X horas, pero el tiempo no les ha dado la razón. O dicho algoritmo falla, o la información no es totalmente real o sencillamente falla más que una escopeta de feria.
Visto lo visto, nos esperan meses llenos de propaganda electoral en la red. La viralidad de la red es algo que aprovecharán las fuerzas políticas de cara al 20-N, no tengáis la menor duda. Veremos hashtags politizados, creedme, como también veremos perfiles de Twitter que morirán días después de las elecciones. Seguramente sacaremos algo en positivo, pero de momento yo veo más SPAM que información. Que nos coja dios confesado…