Hollywood, las guerras, las noticias… han hecho que lo largo de los años aprendamos los nombres de muchas armas. Pero si hay una mítica entre todas ellas, ésa sin duda es el fusil AK-47, el también conocido como Kalashnikov. Es posible que no sepas quien fue Nikita Kruschev, ni cuánto duró la segunda guerra mundial, pero seguro que sabes reconocer una AK-47. Ha sido (y sigue siendo) el fusil de las guerrillas, el de los pobres, el que han usado tanto niños como soldados profesionales durante mas de 60 años. Para algunos es un emblema de la revolución, mientras que para otros es más bien el arma del comunismo. Pienses lo que pienses, lo cierto es que es un arma que se ha llevado a muchas personas por delante.
Su creador sigue vivo, y con 91 años aun colabora con el ejército ruso. Es el fusil oficial de 55 estados, y por ejemplo, Mozambique lo lleva en su bandera. Se han vendido al menos 100 millones de Kalashnikov desde 1947. Su facilidad de uso, la resistencia de éste a las inclemencias del tiempo y su bajo coste de producción han hecho que muchos lo llamen “el mejor fusil del mundo”. ¿Un dato curioso? Sus derechos no están patentados, por lo que se dice que su inventor, el señor Kalashnikov jamás vio un rublo por éstos.
Si lo pensáis, para nosotros el AK-47 es un arma horripilante. Es curioso, porque todas las armas son horribles, pero el Kalashnikov se lleva la palma. Es lo que tiene vivir en occidente, amigos míos. Durante años hemos visto combatir a las guerrillas, a los integristas o talibanes con esa arma, aplicándole un agravante entupido. El Kalashnikov ha sido y será el arma de “los malos”, todo gracias a los Estados Unidos. Lo que nunca te dirán es que su M-16, el fusil del ejército norteamericano es tan peligroso como el soviético. ¿Que cosas, eh?
Ahora ya sabéis más sobre esa arma. No me deis las gracias, dádselas a @ivalladt, de él es la culpa de que yo escribiese sobre el “chopo” ruso. ¿Cuantos nombres de armas conocéis? Si listaseis todos los nombres propios de armas que conocéis os sorprenderíais. No hace falta ir a vivir a América para ser un experto en armas, la prensa y el cine han hecho que nos hagamos expertas en ellas…
Es un post estúpido, pero al menos he revivido el blog. Mañana vuelvo a la carga con mas chicha, palabra.