Quien diga que los murales de graffiti no son arte…es que no tiene ni idea de lo que es el arte. Se sustituyen los lienzos por paredes blancas que para lo único que sirven es para pegar carteles que se van amontonando de forma triste. Los pinceles desaparecen para hacer hueco a sprays, aerosoles que se mueven con rapidez y hacen trazados mágicos.
Desde que soy un crio disfruto de ellos. Hace muchos años yo era un amante de este arte, de hecho hasta graffiteé durante unos años. Ahora sigue gustandome ver y disfrutar de muros pintados con aerosol. Aún sin tener la misma pasión que hace diez años sigo disfrutando del graffiti, y fruto de ello es este post. Hoy traigo unas cuantas fotos de mi ciudad, de sus paredes… y de como un grupo de personas la han sabido decorar de forma tan bonita.