Es triste pero cierto, iba pensando en que iba a ver un buen numero de obras de arte moderno y me he vuelto con un mal sabor de boca, al menos en lo que arte se refiere. Como sabréis los que seguis este blog hoy era el día en el que iba a pasar el día a Bilbao a modod e excursión y entre otras cosas iba a hacer una visita a su emblema, el museo Guggenheim. Me esperaba un museo con una colección permanente interesante, un par de salas con alguna obra de Kandinsky, Warhol, Mondrian o así pero no, lo que me he encontrado ha sido 4 obras gigantes en la primera planta , una segunda planta vacia por cambio de exposición y una genial exposición en la tercera planta del museo. Resumiendo puedo decir que si no es por la exposición del gran Murakami salgo de aquel edificio de titanio echando rayos por la boca.
Empecemos a relatar los sucedido. Llego a eso de las 11 al museo, cojo la audioguíay comienzo nervioso la visita. No sé por donde empezar, me topo con una obra de arte y me lanzo con la audioguia a disfrutar de la explicación de la misma. Voy a un mapa interactivo y me encuentro con que solo hay dos salas abiertas en la primera planta: una de ellas es en la que estoy ahora y otra es la inmensa sala donde se expone la gigantesca obra de acero de Richard Serra llamada la materia del tiempo. El conjunto de piezas de acero de Serra es magnifico, muy interesante, pero sólo eso, no hay nada mas decente en toda la primera planta. Miro el reloj: llevo 20 minutos en el museo y ya me he visto una de las tres plantas, creo que voy camino de lograr un record personal. Total subo a la siguiente planta: esta cerrada por cambio de exposición. Esto si que es un record, acabo de ver el 60% del referente de arte moderno de Bilbao y de Euskadi en 23 minutos. En serio, hay algo que no entiendo en todo esto, pero mas tarde hablaré sobre ello, sigamos con la hsitoria…
Finalmente llego a la última planta que esta totalmente dedicada a Takashi Murakami, uno de los referentes del arte japones de los ultimo 20 años. Murakami le da a su arte un toque manga, de hecho uno de sus personajes mas empleados en su obra llamado Mr. Dob esta basado en Doraemon. Bueno, sobre esta exposición prefiero hablar en otro post y dedicarle una extensa critica debido a la calidad de la misma. Acabo de ver todas las salas que ocupa la exposición del artista japones. Son apróximadamene las 12.30 y acabo de salir del museo con una sensación de haber salido de una galeria de arte, no de un museo. En serio, el Guggenheim es mas una enorme sala de exposiciones que un museo en si. Se dan conciertos, mitines, de vez en cuando viene una gran colección y todo esto viene envuelto con cuatro obras de arte expuestas de forma permanente envueltas en un caro titanio. Sintiendolo mucho, he visto mejores museos que el Guggenheim la verdad, me encanta el edificio y me encanta la exposicióna ctual de Murakami, incluso el conjunto mastodontio de Serra… pero a eso yo no le llamaría museo. Quizás sea que mi concepto de museo se ha quedado obsoleto, que se yo.
Nefasta experiencia la verdad. Volveré para ver alguna otra colección interesante, por lo demás es casi mejor observarlo por fuera que adentrarse en él, te ahorrarás 8 euros que los podrás invertir en comer por el casco viejo de Bilbao o en tomarte algo en la Gran Via. Por cierto, ya que estamos deciros que la tienda es de las mas caras que he visto en mi vida en un museo, con especial acento en el merchandising oficial que se ha traido el nipón,d e todo menos barato. Me he querido comprar una guapisima alfombrilla para el ratón pero al darle la vuelta me he encontrado con que valía ¡25 euros! quita quita, para él.
Os dejo por un rato, luego si repongo fuerzas os contaré más sobre como ha ido el resto del día, ahora voy a poner la calefacción y a tomarme una aspirina, ¡taluegooor!